Jun 04

La producción teatral de (IWC-CTI) pone de relieve la lucha de las mujeres

«Ji Jasi Apki Marzihat» cautiva al público con un convincente monólogo sobre el maltrato a la mujer en la sociedad india

 

El Festival Internacional de Teatro Anarquista de Montreal acogió recientemente una obra que invita a la reflexión, producida por el Centro de Trabajadores Inmigrantes (IWC-CT), que arroja luz sobre los retos a los que se enfrentan las mujeres y subraya la importancia de su empoderamiento. Titulada «Ji Jasi Apki Marzihat», dirigida y actuada por Nitu Sharma y escrita por Nadira Zahir Babber, cautivó al público con su crudo retrato del maltrato a las mujeres musulmanas desde una óptica feminista. La obra se representó en hindi con subtítulos en francés e inglés.

La obra se desarrolló como un monólogo fascinante, centrado en el personaje de Sakina, una mujer musulmana sometida a diversas formas de abuso y opresión en la sociedad. Con una narración poderosa y actuaciones evocadoras, la producción pretendía exponer el sufrimiento y el dolor que padecen las mujeres como Sakina, llamando la atención sobre la necesidad de cambio social y empoderamiento.

A lo largo de la representación, la historia de Sakina se fue desarrollando, sumergiendo al público en las realidades a las que se enfrentan innumerables mujeres en situaciones similares. El solo representó ingeniosamente la lucha de Sakina, que se vio atrapada en un matrimonio no deseado, soportando años de abusos a manos de su marido. La obra ahondaba en las presiones y expectativas sociales que la confinaban, poniendo de relieve el maltrato que sufren las mujeres en una sociedad profundamente patriarcal.

A medida que avanzaba la narración, el escenario se convertía en una representación simbólica de la vida de Sakina, transformándose para reflejar sus experiencias. El público quedó cautivado por la capacidad de la artista para transmitir las profundas emociones y los retos a los que se enfrenta Sakina, fomentando la empatía y la comprensión entre los espectadores.

El punto de inflexión de la obra se produce cuando Sakina, decidida a liberarse de su matrimonio abusivo, se arma de valor y pide el divorcio. Sin embargo, su decisión desembocó en una serie de desafortunados acontecimientos que la dejaron a ella y a sus hijos sin hogar y abandonados por su familia. Este trágico giro de los acontecimientos ejemplificó los obstáculos sistémicos a los que se enfrentan las mujeres que desafían las normas y expectativas sociales.

En un giro inesperado, el camino de Sakina se cruzó con el de un anciano con el que su familia insistió en que se casara. Dividida entre la seguridad que él le ofrecía y sus ansias de independencia, Sakina aceptó el matrimonio a regañadientes. No sabía que esta decisión la empujaría a una revelación desgarradora.

La obra alcanza su clímax cuando Sakina descubre las siniestras intenciones de su nuevo marido hacia su hija. Impulsada por su amor inquebrantable y su instinto maternal, Sakina tomó una medida drástica para proteger a su hija, que acabó con la vida de su marido. El dramático final dejó al público en estado de reflexión, contemplando hasta qué punto puede llegar una mujer cuando se ve empujada al borde del abismo por la injusticia social.

Hablando de la obra, el director Sharma expresó: «Pretendíamos llamar la atención sobre el maltrato y las luchas a las que se enfrentan las mujeres, especialmente las de comunidades marginadas. Ji Jasi Apki Marzihat» sirve de plataforma para el diálogo, animando a los espectadores a cuestionar las normas existentes y a contribuir a una sociedad más igualitaria e integradora».

El impacto de la obra fue evidente, ya que los debates resonaron entre el público mucho después de que cayera el telón. Inspirados por la capacidad de recuperación de Sakina y por los grandes temas presentados, los espectadores reflexionaron sobre la urgente necesidad de un cambio social y de la emancipación de la mujer. Muchos asistentes salieron del teatro con un compromiso renovado para desafiar los sistemas opresivos y apoyar el avance de los derechos de la mujer.

«Ji Jasi Apki Marzihat» no sólo entretuvo, sino que sirvió de catalizador para la transformación social, ofreciendo un poderoso recordatorio de la responsabilidad colectiva de abordar la desigualdad de género. Al entrelazar la narración

Artículos Relacionados